lunes, 10 de octubre de 2011

Experiencias de la JMJ de un joven y un matrimonio del MFC de Burgos


Hola soy Abel  y queria compartir mi experiencia en la JMJ

Este verano he ido a la JMJ, aunque anteriormente estuve en Burgos con unos franceses que vinieron de la zona sur de Francia (Carcasson). A dos de ellos los acogimos en mi casa). Con ellos pasé 4 días en Burgos, donde realizamos diversas actividades (excursiones, ratos de oración, misas, juegos didácticos, vigilia…). El último día celebramos una misa (la llamada del envío) donde nos juntamos todos los jóvenes que íbamos a acudir a la JMJ de Madrid, presidida por el Arzobispo de Burgos.


Yo fui la JMJ con la Renovación Carismática. Fue una semana inolvidable, para mí fue la mejor semana de mi vida a pesar de las condiciones climáticas, que tuvimos variedad. Como dato a recalcar es la generosidad de los vecinos de la zona de Cuatro Vientos, porque cuando nos dirigíamos a la explanada hacía mucho calor y los vecinos desde los balcones nos mojaban con mangueras, y se agradecía mucho.


Para finalizar quiero decir que dentro de dos años, si Dios quiere, si, si, si me iré para Brasil.


ABEL MARTINEZ AVILA

un antes y un despues...


De la Jornada Mundial de la Juventud hay un antes y un después, lo recordaremos toda la vida.

            Estábamos un poco nerviosos en casa, íbamos a recibir dos jóvenes en casa, era la primera vez que acogíamos a alguien en casa que no fuese parte de la familia. Resultó muy bien, yo creo que las chicas se sintieron acogidas, y de hecho seguimos manteniendo el contacto. Fueron días intensos de muchas actividades, y nosotros como familia acudimos a todo lo que pudimos en Burgos. Los niños estaban encantados, se respiraba un gran ánimo en las calles. Íbamos con banderas, con las camisetas de color de las Jornadas y de la Parroquia,  en fin, nos contagiábamos los unos a los otros la alegría.

            Hemos tenido contacto con jóvenes de diferentes partes del mundo, cada uno  vivía una realidad familiar social diferente, pero con una misma ansia de Dios.

          

  Lo que vivimos en Burgos solo fue una avanzadilla, ya que una vez en Madrid, fue algo desbordante. Martín yo y los niños fuimos a Madrid el viernes 19 por la mañana y estuvimos hasta el domingo 21 de agosto. Llegamos en varios autobuses desde Burgos, al colegio de acogida de Madrid. Después de comer, acudimos al Vía Crucis del Papa, nada más llegar al metro empezamos a percibir que no éramos unos pocos, estaba lleno de gente joven que no hacía más que cantar,  y gritar de alegría “Esta es la juventud del Papa”… acabábamos cantando todos como locos…

            Una vez situados junto con los jóvenes de nuestra parroquia esperamos con gran impaciencia la venida del Papa, estábamos emocionados, estuvimos muy cerca de El, yo creo que sin dudarlo el también lo estaba. Acabamos la jornada muy cansados pero felices.

            Al día siguiente temprano marchamos hacia Cuatro Vientos cargados de los sacos y esterillas para dormir allí. Si nos había parecido que había mucha gente, en Cuatro Vientos había una barbaridad, jóvenes de todo el mundo, religiosas, sacerdotes,… Resultó un día largo pero intenso, se respiraba mucha paz, y la sensación era de no estar solos.

            Me ha dado muchas fuerzas el ver que hay tanta gente joven que cree en Cristo y desea permanecer firmes en la fe.  También he visto gente joven que ha hecho un gran sacrificio por acudir a las Jornadas con la esperanza puesta en Dios.

            Después de todo lo vivido solo me queda orar por todos los jóvenes y por las familias para a pesar de las dificultades permanezcamos FIRMES EN LA FE.

Loles y Martin

1 comentario:

Teresita dijo...

Muchas gracias por vuestro testimonio! La verdad es que la JMJ ha supuesto un empuje en la fe de todos y debemos dar testimonio de ello! Un saludo a todos