Tras llegar a las 14:30 hora local a Jordania, Benedicto XVI ha recibido el saludo protocolario en el propio aeropuerto. Acto seguido, se ha dirigido en un coche blindado con matricula jordana al Centro Regina Pacis, a las afueras de Aman. Este complejo es una iniciativa caritativa del Patriarcado Latino de Jerusalén que se encarga de rehabilitar a las personas discapacitadas.
El Santo Padre ha sido recibido con cantos de bienvenida, tanto en arabe como en italiano, por los fieles venidos de todo Oriente Medio. Durante las largas horas de espera se ha podido respirar un gran ambiente de fiesta. Las banderas vaticanas y de varias naciones han sido sacudidas con fuerza en todo momento. En alguna ocasión se han escuchado gritos de “Viva el Papa” en español, al haber una fuerte presencia de religiosas argentinas en la zona.
A su entrada en templo, hacia las tres y media de la tarde, el Pontifice ha expresado su afecto y cercania hacia los enfermos con varios gestos de cariño. Ha sido especialmente emotivo el largo abrazo que ha intercambiado con un joven con sindrome Down. Tras el saludo del patriarca Fouad Twal, ha tenido lugar un momento de oracion presidido por el Papa.
En el discurso que ha pronunciado ante unas 600 personas, la mayoría jóvenes y agentes sanitarios del centro, el Pontifice ha insistido que como innumerables miles de peregrinos ahora es él quien viene a tocar, a venerar y a obtener consuelo de los lugares donde Jesus vivió y que fueron santificados por su presencia. “Desde los tiempos apostólicos, Jerusalén ha sido el principal lugar de peregrinación para los cristianos, pero aún antes que eso sucediera, los pueblos semitas construyeron aqui lugares para indicar y conmemorar una presencia o una accion divina“, ha recordado. “Traian una parte de los frutos de su tierra, sus animales para ofrecerlo como ofrenda y en homenaje y gratitud”, ha proseguido. “Todos somos peregrinos” en nuestras vidas, ha subrayado.
El Papa, pensando en los pacientes, ha dicho también que sabía que el viaje que ha conducido a muchos de ellos al Centro Regina Pacis ha estado marcado por el sufrimiento y la consternación. “Algunos de vosotros habéis luchado valientemente contra formas de discapacidad, otros habéis tenido que soportar el rechazo y otros habéis llegado a este centro de paz simplemente para encontrar un remanso de paz y de apoyo. Asi, el Santo Padre ha señalado que la “importancia” de este centro radica en “el promover y encontrar el justo lugar del discapacitado en la sociedad y asegurarle un adecuada integración”.
Por la tarde, Benedicto XVI ha mantenido un encuentro privado con los monarcas jordanos en el Palacio Real. El Pontifice ha sido recibido con los preceptivos honores de jefe de Estado por la guardia real perfectamente uniformada. En el patio de la residencia le esperaban los reyes con sus hijos. Con esta visita de cortesía ha concluido el programa del Papa en su primer dia en los Santos Lugares. Manana esta previsto que el Santo Padre viaje al monte Nebo, donde según la Biblia el Señor mostró a Moisés la Tierra Prometida.
Fuente: Alba
El Santo Padre ha sido recibido con cantos de bienvenida, tanto en arabe como en italiano, por los fieles venidos de todo Oriente Medio. Durante las largas horas de espera se ha podido respirar un gran ambiente de fiesta. Las banderas vaticanas y de varias naciones han sido sacudidas con fuerza en todo momento. En alguna ocasión se han escuchado gritos de “Viva el Papa” en español, al haber una fuerte presencia de religiosas argentinas en la zona.
A su entrada en templo, hacia las tres y media de la tarde, el Pontifice ha expresado su afecto y cercania hacia los enfermos con varios gestos de cariño. Ha sido especialmente emotivo el largo abrazo que ha intercambiado con un joven con sindrome Down. Tras el saludo del patriarca Fouad Twal, ha tenido lugar un momento de oracion presidido por el Papa.
En el discurso que ha pronunciado ante unas 600 personas, la mayoría jóvenes y agentes sanitarios del centro, el Pontifice ha insistido que como innumerables miles de peregrinos ahora es él quien viene a tocar, a venerar y a obtener consuelo de los lugares donde Jesus vivió y que fueron santificados por su presencia. “Desde los tiempos apostólicos, Jerusalén ha sido el principal lugar de peregrinación para los cristianos, pero aún antes que eso sucediera, los pueblos semitas construyeron aqui lugares para indicar y conmemorar una presencia o una accion divina“, ha recordado. “Traian una parte de los frutos de su tierra, sus animales para ofrecerlo como ofrenda y en homenaje y gratitud”, ha proseguido. “Todos somos peregrinos” en nuestras vidas, ha subrayado.
El Papa, pensando en los pacientes, ha dicho también que sabía que el viaje que ha conducido a muchos de ellos al Centro Regina Pacis ha estado marcado por el sufrimiento y la consternación. “Algunos de vosotros habéis luchado valientemente contra formas de discapacidad, otros habéis tenido que soportar el rechazo y otros habéis llegado a este centro de paz simplemente para encontrar un remanso de paz y de apoyo. Asi, el Santo Padre ha señalado que la “importancia” de este centro radica en “el promover y encontrar el justo lugar del discapacitado en la sociedad y asegurarle un adecuada integración”.
Por la tarde, Benedicto XVI ha mantenido un encuentro privado con los monarcas jordanos en el Palacio Real. El Pontifice ha sido recibido con los preceptivos honores de jefe de Estado por la guardia real perfectamente uniformada. En el patio de la residencia le esperaban los reyes con sus hijos. Con esta visita de cortesía ha concluido el programa del Papa en su primer dia en los Santos Lugares. Manana esta previsto que el Santo Padre viaje al monte Nebo, donde según la Biblia el Señor mostró a Moisés la Tierra Prometida.
Fuente: Alba
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