Cada primer y tercer domingo de mes, a las 13 horas, en la cripta de la catedral de la Almudena, la agrupación Schola Gregoriana de Madrid ofrecerá un concierto de canto gregoriano, bajo la dirección del antiguo Maestro de Capilla de la basílica romana de San Pablo Extramuros, Francesco Ercolani
La Schola masculina, en la catedral de Getafe
. El coro Schola Gregoriana de Madrid nació gracias al entusiasmo de su director, Francesco Ercolani, y de su Presidente, Gonzalo Ortega. Ercolani se trasladó en el año 2004 a Madrid para conocer los distintos aspectos de música sacra que se desarrollaban en España. Para ello tuvo que renunciar al cargo de Maestro de Capilla de la basílica de San Pablo Extramuros de Roma. Pero al poco tiempo de llegar, en junio de 2006, surgió la posibilidad de acompañar al Coro Schola Gregoriana de Madrid. Un total de 43 personas de todas las edades (el último en unirse al coro ha sido un chico de 15 años) forman parte de esta agrupación musical, que se reúne semanalmente en la parroquia de San Ginés, donde tiene su sede.
Gonzalo Ortega subraya que los ensayos son auténticas clases de Teología, no sólo de música. Ercolani, por su parte, insiste tanto en el nivel musical de sus pupilos, como en la necesidad de que los ensayos vayan más allá de lo estrictamente musical. Ambos lamentan la escasez de oferta de este tipo de música, que contrasta con el interés, cada vez mayor, del público. Cuentan que, en más de una ocasión, han repetido, hasta tres veces, un concierto para que las personas que se habían quedado, en un principio, sin entrada, pudieran escuchar el repertorio.
Schola gregoriana de Madrid tiene un futuro prometedor, que querría compartir con nuevas incorporaciones. Ortega insiste en que cualquier persona que sea mayor de edad y sepa leer música puede solicitar una audición de ingreso.
Gonzalo Ortega subraya que los ensayos son auténticas clases de Teología, no sólo de música. Ercolani, por su parte, insiste tanto en el nivel musical de sus pupilos, como en la necesidad de que los ensayos vayan más allá de lo estrictamente musical. Ambos lamentan la escasez de oferta de este tipo de música, que contrasta con el interés, cada vez mayor, del público. Cuentan que, en más de una ocasión, han repetido, hasta tres veces, un concierto para que las personas que se habían quedado, en un principio, sin entrada, pudieran escuchar el repertorio.
Schola gregoriana de Madrid tiene un futuro prometedor, que querría compartir con nuevas incorporaciones. Ortega insiste en que cualquier persona que sea mayor de edad y sepa leer música puede solicitar una audición de ingreso.
Seña de identidad europea
El director, Francesco Ercolani, durante
una intervención en la Capilla Sixtina
El músico italiano reivindica el canto gregoriano como patrimonio de la Humanidad, y especialmente como seña de identidad del Viejo Continente. Explica que, si no conocemos el canto gregoriano, difícilmente podremos entendernos a nosotros mismos: «Fue, en su origen, el primer intento por unir Europa con un repertorio común. Desconocer el canto gregoriano es como no conocer El Quijote».
El canto gregoriano es un tipo de canto monódico, es decir, a una sola voz, impulsado por el Papa Gregorio I (590-604), san Gregorio Magno, quien introdujo importantes modificaciones en la música eclesiástica para la liturgia del rito romano. Desde su nacimiento, la música cristiana fue una oración cantada, que debía realizarse con devoción o, como lo explicaba san Pablo,cantando a Dios en vuestro corazón. El texto era, pues, la razón de ser del canto gregoriano. Por eso, este tipo de música jamás podrá entenderse sin el texto, que tiene prelación sobre la melodía y que es el que le da sentido a ésta. Al interpretarlo, los cantores deben haber entendido muy bien el sentido. A ello dedica parte de los ensayos Ercolani.
En los últimos años, el coro ha cantado en distintos países. En España, además de los conciertos que se programan, también cantan en contextos litúrgicos. Echando la vista atrás, Gonzalo Ortega se enorgullece, al recordar el año 2007, momento en el que el Vaticano invitó a la Schola Gregoriana de Madrid a acompañar la liturgia de la Misa Mayor del 8 de diciembre. Según Francesco Ercolani, éste fue un hecho excepcional, ya que sólo se invita a cantar a coros externos al Vaticano en las misas ordinarias, y nunca coincidiendo con una solemnidad como la Inmaculada.
El coro se financia fundamentalmente con la recaudación de los conciertos. Cuenta también con la ayuda incondicional de don José Luis Montes, párroco de San Ginés, y con el apoyo institucional del Área de las Artes del Ayuntamiento de Madrid y la Asesoría de Música de la Comunidad de Madrid.
El ciclo de conciertos en la cripta de la Almudena se plantea como un bonito reto, que no habría sido posible sin la ayuda del Deán de la catedral, don Antonio Astillero. Un marco «muy apropiado», ha dicho Francesco Ercolani, para hacer que Dios suene y resuene en el interior de los que asistan.
El canto gregoriano es un tipo de canto monódico, es decir, a una sola voz, impulsado por el Papa Gregorio I (590-604), san Gregorio Magno, quien introdujo importantes modificaciones en la música eclesiástica para la liturgia del rito romano. Desde su nacimiento, la música cristiana fue una oración cantada, que debía realizarse con devoción o, como lo explicaba san Pablo,cantando a Dios en vuestro corazón. El texto era, pues, la razón de ser del canto gregoriano. Por eso, este tipo de música jamás podrá entenderse sin el texto, que tiene prelación sobre la melodía y que es el que le da sentido a ésta. Al interpretarlo, los cantores deben haber entendido muy bien el sentido. A ello dedica parte de los ensayos Ercolani.
En los últimos años, el coro ha cantado en distintos países. En España, además de los conciertos que se programan, también cantan en contextos litúrgicos. Echando la vista atrás, Gonzalo Ortega se enorgullece, al recordar el año 2007, momento en el que el Vaticano invitó a la Schola Gregoriana de Madrid a acompañar la liturgia de la Misa Mayor del 8 de diciembre. Según Francesco Ercolani, éste fue un hecho excepcional, ya que sólo se invita a cantar a coros externos al Vaticano en las misas ordinarias, y nunca coincidiendo con una solemnidad como la Inmaculada.
El coro se financia fundamentalmente con la recaudación de los conciertos. Cuenta también con la ayuda incondicional de don José Luis Montes, párroco de San Ginés, y con el apoyo institucional del Área de las Artes del Ayuntamiento de Madrid y la Asesoría de Música de la Comunidad de Madrid.
El ciclo de conciertos en la cripta de la Almudena se plantea como un bonito reto, que no habría sido posible sin la ayuda del Deán de la catedral, don Antonio Astillero. Un marco «muy apropiado», ha dicho Francesco Ercolani, para hacer que Dios suene y resuene en el interior de los que asistan.
Amparo Latre
www.alfayomega.es
Próximos conciertos
Enero:
Domingo 9: Agrupación masculina y femenina
Domingo 16: Agrupación femenina
Febrero:
Domingo 6: Agrupación masculina
Domingo 20: Agrupación femenina
Marzo:
Domingo 6: Agrupación masculina
Domingo 20: Agrupación femenina
Todos los conciertos comenzarán a las 13 horas.
Más información: gonortega@yahoo.es y Tel. 616 446 789.
Domingo 9: Agrupación masculina y femenina
Domingo 16: Agrupación femenina
Febrero:
Domingo 6: Agrupación masculina
Domingo 20: Agrupación femenina
Marzo:
Domingo 6: Agrupación masculina
Domingo 20: Agrupación femenina
Todos los conciertos comenzarán a las 13 horas.
Más información: gonortega@yahoo.es y Tel. 616 446 789.
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