Diario del peregrino desde la Deleju de Madrid
¡Cómo agradecer todo el bien que nos han hecho! La estancia en Wroclaw está siendo realmente impresionante. Tres días en los que hemos podido disfrutar de una de las ciudades más importantes de Polonia, cuna de santa Edith Stein, y que nos ha recibido con los brazos abiertos.
Nos hemos repartido en 18 parroquias, que nos han ido acogiendo en diferentes familias, exactamente lo mismo que hicimos nosotros hace cinco años en Madrid 2011.
El primer día, tras la acogida espectacular de nuestros hermanos en la fe al final de la jornada anterior de largo viaje desde Frankfurt, tuvimos las respectivas Misas con la gente de las parroquias de alojamiento. Más tarde nos dividimos en grupos para poner en práctica aquello que nos pide el Papa Francisco en este año jubilar: hacer obras de Misericordia. Para ello, la organización preparó diversas actividades, tales como visitar enfermos o ir a un cementerio a rezar por los difuntos. Especialmente bonito es este gesto, pues por iniciativa de un sacerdote se reza especialmente por los caídos alemanes de la Primera Guerra Mundial como símbolo de la reconciliación del corazón con los hermanos. No es fácil en una ciudad que fue polaca hasta mediado el siglo XII y que hasta después de la Segunda Guerra Mundial estuvo ocupada por otras naciones como Prusia o la posterior Alemania.
Asimismo asistimos al Festival de la Misericordia y la adoración de la Cruz.
La segunda jornada tuvo como gran evento la Eucaristía todos juntos en la iglesia de San Miguel tras pasar por la puerta de la Misericordia y ganar la indulgencia. Ya por la tarde tuvimos un concierto en el estadio de fútbol de la ciudad, que fue construido especialmente para la Eurocopa de 2012 que ganó España. Destacó la presencia en el escenario de sor Cristina, religiosa que se hizo famosa por vencer la versión italiana del programa de televisión La Voz.
Hoy estamos pasando el día junto a nuestras familias de acogida, disfrutando de su compañía y conociendo un poco mejor esta ciudad, su cultura, su historia y, sobre todo, sus gentes.
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